En conmemoración del 213° aniversario de la Batalla de Las Piedras se llevó a cabo el tradicional acto protocolar en Plaza Independencia, el cual es organizado por el Departamento de Cultura de la Intendencia de Río Negro y Municipio de Young.
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La actividad protocolar inicio a las 10:00 horas, con la entonación del Himno Nacional y palabras alusivas a la fecha de Jonathan Benítez y Bruno Falcón, alumnos de 6° año de la Escuela N°17 «Domingo de Arce».
Actuación artística a cargo del taller de danza folklórico del Departamento de Cultura a cargo de la Prof. Silvia Arcidíaco.
Colocación de ofrendas floral al pie del monumento al Prócer, General José Gervasio Artigas.
Para finalizar se entonó Marcha «Mi bandera» y despedida de los pabellones patrios.
Palabras alusivas a la fecha.
18 DE MAYO 1811 «BATALLA DE LAS PIEDRAS».
«Los tiempos de conmemoración son también tiempos de reflexión y este 18 de mayo nos convoca y nos brinda una oportunidad para recordar el hecho histórico de la Batalla de Las Piedras ocurrido hace ya 213 años que condujo al proceso de independencia de la Banda Oriental.
El 18 de mayo de 1811 se encontraron en este lugar, en dura batalla, Artigas, Jefe de los Orientales, frente a un pueblo en armas y el Capitán Posadas, al mando del ejército español.
Pero antes, ¿qué había sucedido?
En 1810, en Buenos Aires, una Junta revolucionaria se había levantado contra la corona española y necesitaban el apoyo oriental. José Artigas, de 46 años de edad y que hasta el momento había sido capitán de Blandengues, fue nombrado por esta Junta, Jefe de las Milicias Orientales.
El 28 de febrero había estallado la revolución en la Banda Oriental con el Grito de Asencio, suceso conocido como «la admirable alarma», que comienza a conmover a las masas y se extiende como reguero de pólvora por la campaña.
En los primeros días de abril José Artigas se incorpora a este movimiento revolucionario estableciendo su cuartel general que era en realidad un campamento donde las ideas se planeaban en fogones en la ciudad de Mercedes. Desde allí, en vibrante proclama, llamó a los patriotas que quisieran tomar las armas y ponerse a sus órdenes.
Las repercusiones fueron favorables y en su camino hacia el sur, Artigas va reuniendo a los patriotas sueltos que se levantan por todas partes con la idea de libertad.
De todas partes vienen los orientales hacia Las Piedras. El 18 amaneció sereno, luego de varios días de lluvia y según los documentos escritos, hacia las 11 de la mañana se inicia la batalla que termina avanzada la tarde, con la victoria de los orientales.
Ese día Artigas se mostró como un general experto, aprovechando la topografía del suelo con una estrategia de combate que aseguró la victoria. Atacó por el frente, costados y retaguardia, con un ejército que tan solo contaba con un armamento totalmente improvisado: unos pocos fusiles y 2 cañones, boleadoras, lanzas construidas con tijeras de esquilar atadas a cañas de tacuara o ramas de los árboles que usaban como «picanas» para arrear el ganado. Pero estos criollos tenían un impetu imposible de frenar.
Finalizada la batalla es pronunciada una de las frases más recordadas en el decir de Artigas, que reflejan el sentido e igualdad y la calidad humana de nuestro Prócer, «Clemencia para los vencidos, curad a los heridos, respetad a los prisioneros» y que marcan claramente el perfil humanista del General. En la cual se enseña que en la victoria o en la derrota nadie es más que nadie.»
*Cobertura Álvaro Mendaro
